Recobrando tiempo perdido

CAPITULO.  50

(NARRA (Tú))
Yo: Tranquila....- Justo me sonó el teléfono, era Louis.
Yo: Lo siento tengo que coger.- Me levanté y me aparte un poco.
Yo: Hola Louis.
Louis: Hola, ¿que te pasa? Últimamente te noto rara la voz, ya se que tu madre, bueno, pero, ¿te pasa algo?
Yo: Si me pasa algo.
Louis: Que es lo que pasa.
Yo: Tengo una hermana.- Louis se quedó varios segundos en silencio.
Louis: ¿!Cómo que una hermana?!
Yo: Necesito que no se lo digas a nadie.
Louis: Porque no quieres que se lo diga a nadie.
Yo: Tengo que dejarte.
Louis: Bale, con lo que sea me cuentas que sepas que me tienes aquí para lo que sea.
Yo: Louis.
Louis: Dime.
Yo: Gracias por todo lo que haces por mi.
Louis: No tienes porque dármelas.- Colgué, y me volví a sentar con Ariana.
Ariana: ¿Quien era?
Yo: Mi...mi.... Un amigo.
Ariana: He estado pensando una cosa, vamos a una clínica médica, nos hacen una prueba de sangre a cada una para salir de dudas.
Yo: Y si da que no somos hermanas...
Ariana: No lo sé....- Agacho la cabeza.
Yo: Mira, si somos hermanas bien, y si no lo somos también, me da igual que no seas mi hermana, nunca he sentido la sensación de tener una hermana, al principio, me asusté un poco, pero luego sentí que no estaba sola, y, por lo menos yo, no quiero cambiar esta sensación por nada.
Ariana: Yo tampoco.- Nos levantamos y nos dimos un abrazo.
Yo: Que te parece si nos olvidamos de las pruebas.
Ariana: Te quiero, hermanita.
Yo: Y yo.- Terminamos de tomar algo, y nos fuimos a su casa. Era genial tener una hermana, era como tú mejor amiga, solo que era de tú familia, era mucho más que una amiga, porque ya sabías que ella nunca te iba a decepcionar. Estuvimos todo el día juntas. Al finalizar el día, llame a mi tía por teléfono diciendo que no iba ha ir a casa a dormir, porque me quedaba a dormir a casa de una amiga, no le dije nada de lo de mi hermana, porque se iba a poner muy nerviosa.
El portal no tenía muy buena pinta, las escaleras daban miedo, algunas tenían polillas, era bastante peligroso subir por esos peldaños. Esperaba que la casa no estuviera igual, pero por suerte no fue así.
La casa estaba muy limpia, y era muy cálida. Entramos a su cuarto.

Me quede boquiabierta. El cuarto no se equilibraba para nada con la casa, la habitación era una pasada.

Ariana: ¿Te gusta?

Yo: No te ofendas si me quedo asombraba, pero es que es muy raro que tú habitación sea tan, y le casa se tan.... en fin... que....¿guay?

Ariana: Todo el mundo que la ve se queda igual que tú.

Yo: Pero como has conseguido esto.
Ariana: Llevo desde los cinco años soñando con una habitación así, asique he ido ahorrando de lo que sacaba de la tienda.
Yo: Bueno, es muy bonita- Me dejó un pijama he hicimos noche de chicas, contándonos anécdotas, desamores y amores que nos habían pasado durante la vida. Mientras estábamos hablando, me di cuenta de que tenía una guitarra en el armario.
Yo: ¿Tocas la guitarra?- Miró al armario.
Ariana: Si, ¿quieres que te toque un poco?
Yo: Claro, ¿sabes cantar?
Ariana: No, pero si sé bailar, y me encanta.
Yo: Yo al revés, odio bailar y se meda fatal, pero adoro cantar.
Ariana: Hacemos una cosa, yo toco la guitarra, mientras tú cantas, y luego, pongo una canción y te hago una coreografía.
Yo: Me parece genial...

Un mixto de ideas

CAPITULO. 49

(NARRA (TÚ))

Yo: Hace dos años me mude a Inglaterra para acabar la carrera de medicina, me mude con una amiga, Aroa, conocimos a tres chicas más, nos gustaba cantar, hicimos un grupo, y nos alistamos para el musical de fin de curso, estuvimos un año ensayando, pero ese año pasaba algo especial, venían unos jueces de ``The voice´´ nos escogieron, y ahora estamos participando.
Ariana: Yo veo ese programa y la gente no coge fama en otros países.
Yo: Empezamos a ser conocidas cuando empezamos a tratar con One Direction.
Ariana: ¿Conoces a One Direction?
Yo: Si, ¿eres fan?
Ariana: La verdad es que no, soy fan de Justin Bieber, es que está tan bueno....
Yo: Pues no te prometo nada.
Ariana: ¿Tú crees que me lo podrás presentar?
Yo: No te prometo nada, pero ¿cuántos años tienes?
Ariana: Tengo diecisiete años.
Yo: Pero eso es imposible, si se fue cuando yo tenia cuatro años.
Ariana: ¿ Y cuando tienes ahora?
Yo: Diecinueve.
Ariana: Entonces o mi madre tuvo una relación antes de conocer a Eugenio, o Eugenio y mi madre se conocieron antes...- Me levante de la mesa, sin ni siquiera pedir café.
Yo: Salgamos de dudas y preguntemos a tú madre.
Ariana: No va a poder ser...- Agachó la cabeza, me senté
Yo: ¿Que te pasa?
Ariana: Mi madre me abandono cuando murió mi padre, me cuida mi tío, pero.... Nos van a embargar la casa.- Se puso a llorar.
Yo: Tranquila, todo se va a arreglar.
Ariana: Pero, y si no somos hermanas, me volveré... a quedar sola....
Yo: Tú tranquila, eso no tiene nada que ver, iremos al médico y saldremos de dudas.
Ariana: Tengo miedo...
Yo: Tranquila....- Justo me sonó el teléfono, era Louis.
Yo: Lo siento tengo que coger...

Raices familiares

CAPITULO. 48

(NARRA Louis)
Me fui a mi apartamento, para tumbarme y dejar la mente en blanco, por mas que lo intentaba, no podía parar de pensar en (Tú), sabía que sentía lago por ella, pero nunca había sentido algo tan fuerte por una chica, estaba confundido hacia lo que a mis sentimientos se refería. Tras media hora intentando dormirme, por fin lo logré.

(NARRA (Tu))
Estaba llegando a la tienda de guitarras donde me indicó mi tía, estaba muy nerviosa, no sabía como reaccionar, aparque el coche, me quede dentro, pensando en que sucedería, en como íbamos a reaccionar ambos y lo mas arriesgado, si me aceptaría... Al final me decidí, opte por bajar del coche y dar la cara a mi situación.
Entre a la tienda, armada de valor, me acerque a el mostrador.
Yo: Hola, buenas tardes, podría hablar por Bob Stuart, por favor.- El señor bajo con bigote y gordito me miro mal.
Tendero: Un momento...- Se metió a un cuarto que había tras el mostrador, salió una chica, de aproximadamente unos catorce años.
Chica: Hola, buenos días ¿te puedo ayudar en algo?
Yo: Verás, estoy buscando ha Bob Stuart.
Chica: Lo siento, aquí no trabaja nadie con ese nombre.- Rápidamente saque un papel del bolso que me dio mi tía antes de que me fuera.
Yo: Y alguien llamado Eugenio De la Fuente.
Chica:¿Quien eres?
Yo: Soy la hija de Bob, osea de Eugenio.
Chica: Puedo hablar con tigo en privado.-Me fui con ella a la sala de donde había salido.
Yo: Conoces a mi padre.
Chica: Diría que si.
Yo: ¿Sabes donde lo puedo encontrar?
Chica: Falleció hace un año.- Me puse a llorar, la chica me abrazo.
Yo: No lo puedo creer, estoy sola, sin hermanos, ni familia.
Chica: Yo no estaría tan segura.
Yo: ¿A que te refieres con eso?
Chica: Hay algo que no sabes.
Yo: ¿El que?
Chica: Será mejor que te cuente todo desde el principio, hace unos quince años, Bob, o como lo quieras llamar, vino a Asturias, conoció a una mujer, se enamoraron, pasado un año, la mujer quedó embarazada, y tuvieron una niña, dos años después se casaron, y abrieron una tienda de guitarras, ya que Bob en su anterior vida era cantante,  luego murió de sobre dosis.
Yo: ¿Que me estás queriendo decir con eso?
Chica: Que la hija que tuvieron.... Soy yo.
Yo: Asique somos..... her-her-her...
Chica: Hermanas.
Yo: ¿Te importaría darme un baso de agua?- Fue a por un botellín, me lo bebí de un solo trago.
Chica: Lo que nunca me llegaron a contar es que yo tuviera una hermana, por cierto me llamo Ariana.
Yo: (Tú), encantada....
Ariana: ¿Entonces...?
Yo : Bale, bien, tengo una hermana, bien, bale.
Ariana: ¿Seguro que te encuentras bien?
Yo: Si, te apetece ir a tomar algo y charlamos sobre, esto...
Ariana: Si espera que cojo mi chamarra y voy.- La esperé fuera de la tienda. No tardó mucho en salir. Íbamos andando tan tranquilamente por la acera, cuando una fan me pidió un autógrafo, y me dijo entre llorando de la emoción`` Me encanta tu voz, eres la mejor, ¿le podrías dar a las demás un beso de mi parte?´´ Yo la contesté que si, me saque una foto con ella y seguimos caminando, eso me paso unas dos veces más.
Ariana: No he podido evitar pensar que la gente de adora.- Me reí.
Ariana: ¿Porque te han pedido autógrafos?
Yo: Hace dos años me mude a Inglaterra para acabar la carrera de medicina...

¡Escandalo!

CAPITULO. 48

(NARRA Louis)
 Apenas tardó cinco minutos en venir, pero se me hicieron eternos. Por fin la vi entrar por la puerta. Me levanté, la di dos besos y la invité a un café.
Aitana: ¿Que te ha pasado?
Yo: Es (Tú)...
Aitana: ¿¡Que la ha pasado?!
Yo: Nada, solo que está preocupada por algo y no me quiere decir el que.
Aitana: Es normal que este algo deprimida, recuerda que ha fallecido su madre.
Yo: Pero no es eso, la pasa algo y lo noto.
Aitana: Si quieres la llamo ahora y salimos de dudas.- Sacó el teléfono, llamó a (Tú), lo puso en manos libres, el teléfono daba señal, pero ella no contestaba.
Yo: ¿¡La habrá pasado algo?!
Aitana: Lo primero que tienes que hacer es relajarte, hay mil explicaciones lógicas para que (Tú) no atienda.
Yo: Dime una.
Aitana: Puede estar duchándose, conduciendo, con la familia....
Yo: Tienes razón, me tengo que tranquilizar.
Aitana: Y bastante.- Estuvimos hablando de todo un poco, mientras Aitana me hablaba sobre sus años de equitación, la sonó el móvil, según miró quien la llamaba, se puso mar roja que un cangrejo.
Yo: ¿Quién es?
Aitana: Es Li-li-am.- Dijo con cara de loca
Yo: Si no lo coges ya a lo mejor te cuelga.- Cogió inmediatamente.
Aitana: Si, ¿Quién es?
Liam: Hola, soy yo.
Aitana: Oh, no me había dado cuenta.
Liam: Esto..... ¿te apetece?.... ¿que quedemos para cenar?- Aitana pego un brinco, toda la cafetería se la quedó mirando, pero a ella no le importo en absoluto.
Aitana: No tenia planes, asique si, ¿a que hora?
Liam: Sobre las ¿ocho?
Aitana: Vale.
Liam: A las ocho te paso a recoger al estudio.
Aitana: Ahí estaré.- Colgó.
Yo: Se te ve entusiasmada.
Aitana: ¡¿Se me nota mucho?!- Dijo entrecerrando un ojo, yo me eche un poco para atrás.
Yo: No, para nada.- Dije sin saber claro que decir.
Aitana: Bueno ¿que hora es?
Yo: Las cuatro.
Aitana: Madre mía no llego, y he quedado a las ocho.
Yo: ¿¡Te hacen falta cuatro horas?!
Aitana: Por ahí mas o menos, bueno te dejo que no llego.- Se fue pitando, era mundial, chavala como Aitana no me he encontrado en la vida.
Me fui a mi apartamento, para tumbarme y dejar la mente en blanco...

Noticia inesperada...

CAPITULO. 47

(NARRA Tú)
Tia: Tú padre sigue vivo.- Me reí.
Yo: No estás hablando enserio, no tengo un día para bromas.
Tia: No es broma.- Me puse seria.
Yo: No lo entiendo, cuéntame todo antes de que me desmaye.- Me hice un té.
Tia: Tú tenias cinco años, como tú ya sabes, él iba por mal camino. Tú madre habló con tú padre, acordaron que por tu bien, tu padre saliera de tú vida, se retiró de la música, se cambió de país, de nombre y de apellido, y cambió se físico, hasta hace poco me e enterado que ha vuelto a España  pero aun sigue con la droga, y....
Yo: Quiero verle.- La interrumpí.
Tia: No es buena idea.
Yo: Me habéis estado ocultando a mi padre durante doce años, y ahora que tengo la oportunidad.
Tia: No te puedo dejar, lo siento.
Yo: Es muy injusto, no eres mi madre, y ya soy mayor de edad.
Tia: Esta en Asturias, en una tienda de guitarras, `` The Humans´´- Me levanté y me hice la maleta. Mi tia me miraba extrañada.
Tia: ¡¿Te vas?!
Yo: Tengo que ir a buscarlo, no quiero perder más tiempo. 
Tia: Como quieras, pero yo ya te lo he avisado.
Yo: Me voy.
Tia: ¿Pero como vas a ir? 
Yo: Esperaré en la estación de autobuses.
Tia: Bueno, pues si es lo que quieres, llama cuando llegues.
Yo: Bale.
Tia: Pero donde te vas a alojar.
Yo: Papa, seguro que me dejará dormir en su casa.
Tia: En caso de que no puedas alojarte en ninguna parte llámame.
Yo: No te preocupes. Me voy.- Me fui hacia la puerta.
Tia: ¡Espera!
Yo: Dime.
Tia: Toma.- Me dio unas llaves de coche.
Yo: ¿Que es esto?
Tia: Con todo lo que se oye hoy en día, quita, quita, te vas en mi coche y ya está.
Yo: Pero tu no lo vas a usar.
Tia: Tú tranquila.
Yo: Gracias.- Cogí las llaves y me fui.
Estaba llegando al coche, cuando me sonó el móvil. Era Louis.
Yo: Hola.
Louis: ¿Que tal estas? 
Yo: Sin más....
Louis: Es raro estar sin tí....
Yo: También te hecho mucho de menos.
Louis: Tu voz suena algo rara, ¿estas bien?
Yo: La verdad es que tengo algo de prisa, te prometo que cuando tenga tiempo te lo explico todo.
Louis: Vale, hasta luego.- Se despidió con voz de preocupación.
Me monte en el coche programé en GPS, no estaba muy lejos, unas dos horas de camino, me puse en marcha.

(NARRA Louis)
La noté preocupada al colgar el teléfono, por lo que llamé a Aitana, que era con la que mejor me llevaba y con la que podía hablar de (Tu) sin temor a que le dijera a nadie nada.
Aitana: ¿Si?
Yo: Hola Aitana soy Louis.
Aitana: Hola.
Yo: Tenemos que hablar.
Aitana: ¿Ba todo bien?
Yo: Te cuento en veinte minutos, quedamos en la cafetería de siempre.
Aitana: Bale.- Colgué, me puse lo primero que pille, me puse un gorro y unas gafas de sol para que me reconocieran lo más mínimo. Los veinte minutos pasaron muy deprisa. Bajé a la cafetería, me senté en una mesa del fondo, pedí un jugo de piña, mientras esperaba a Aitana. Apenas tardó cinco minutos en venir, pero se me hicieron eternos...

Emociones....

CAPITULO. 46

(NARRA Tú)
Tia: Venga chicas vamos.- Fuimos hacia el coche, que estaba aparcado en la acera del frente. Nos subimos. Estuve todo el viaje callada. Llegamos a la casa de nuestro primo. Los familiares estaba ahí, todos me miraban, con cara de pena, me daban el pésame. Desde siempre mi familia ha sido muy indecente, por así decirlo, siempre han sido muy cotillas y chismosos, les encanta criticar a la gente, las únicas que de verdad eramos firmes, eramos, yo mi madre y mi tia. El día pasaba muy lento, el ataúd  con mi madre dentro estaba en el salón. La gente colocó las sillas al rededor del ataúd, trazando una u, para escuchar el discurso que tenía que decir, en honor a mi madre. 
Cura: Ahora, la hija de la difunta, dirá unas palabras.- Me puse en la parte trasera de el ataúd.
Yo: Mi madre era una gran mujer.... jamas olvidare su generosidad con todos nosotros.- Me costaba un poco seguir pero me esforzaba, cuando de repente y sin ningún motivo, se formo un barullo, y todo fue por un cotilleo absurdo, el cura intentaba poner orden, pero nadie la escuchaba, yo ya no sabía que hacer.
Yo: ¡MI MADRE ERA UNA GRAN MUJER!- Todo el salón quedó en silencio.
Yo: Solo quería darla un velatorio en condiciones, sé que no era perfecta, cometió errores, todos los cometemos, la vida es así, nos meten a todos juntos, en un mundo lleno de preguntas sin respuesta, con la muerte acechando por todas partes, no vivió una vida fácil, pero hizo lo que pudo por poner una sonrisa en su rostro, he intentando ayudar a todo el mundo, cuando ni siquiera tenía para ella, cuantas veces os ha dado comida  cuando no llegabais a fin de mes, y se quedaba ella sin comer durante unos cinco días, ¿se quejaba? no, muchos de nosotros estamos aquí por ella, y así se lo agradecemos, comportándonos como críos  por un simple cotilleo, ¿no creéis que se lo merece? ¿acaso era tanto pedir?..... pensadlo y recapacitar....- Todo la familia se emocionó. Yo no podía mas y me fui en el autobús a casa de mi tia. Recibí llamadas de todos lo familiares, no atendí ni a uno. Finalmente,  mi tia llegó a casa. 
Tia: Cariño estás bien...
Yo: Sí.- Me quedé con la cabeza agachada.
Tia: Cuando era pequeña solía jugar con mi padre, en el jardín, solíamos jugar al pilla pilla. 
Yo: Como era mi padre.
Tia: Tú padre.... mi hermano... pues....
Yo: Cuanto me gustaría haberlo conocido más.
Tia: Te quería contar una cosa, que nunca te había contado...
Yo: ¿Si? 
Tia: Pues, no es verdad todo lo que sabes de tu padre....
Yo: Que no se....
Tia: No quiero, que te enfades con migo....
Yo: Que pasa.
Tia: Pues....
Yo: Me estas asustando....
Tia: Seguro que lo quieres saber.....
Yo: Suéltalo ya....
Tia: Tú padre sigue vivo.....

Preparándose para el velatorio....

CAPITULO. 45

(NARRA Tú)
Yo: Descuida....- Cogí las maletas y me fui hacia el avión. Mi tia bajó por unas escaleras, me abrazó con fuerza.
Tia: Cariño.... hace años que no te veía.
Yo: Es cierto....
Tia: Lo siento cielo...- Me acarició el pelo. Antes de subir al avión, me despedí de Louis a distancia. Despegamos, desde la ventana vi como todo se hacía pequeño. En escasos minutos ya estábamos fuera  de Londres.
Yo: ¿Y donde voy a dormir tia?
Tia: Te puedes venir a mi casa.
Yo: Gracias....
Tia: Cielo, para que está la familia....
Yo: Algo nuevo en la ciudad desde que no estoy.
Tía: Todo sigue igual, la que has cambiado eres tú.
Yo¿yo?
Tia: Si, ahora tienes acento.
Yo: ¡¿En serio?!
Tia: Si cariño si.
Yo: Me cuentas alguna de las historias que me contabas cuando era pequeña.
Tia: Si, como no.- Estubimos todo el viaje de cuatro horas con historias de la niñez de la tia. Me sentía bien, pero me seguía acordando de mi madre. Llegamos al aeropuerto, donde nos esperaba mi prima, para ir en coche a casa. No manteníamos mucha relación. Llame a las chicas, para que supieran que ya había llegado, estaban con los chicos. Estubimos hablando, mientras llegábamos a casa. 
Llegamos, la casa era pequeña, con tres habitaciones, un baño, la cocina y la sala estaban en la misma sala.
Me invitaron a mi cuarto.
Tia: Este será tu cuarto, no es gran cosa pero...
Yo: Tía, es perfecto.
Tia: Eres tan dulce como lo eras de pequeña, con tus mejillas rojas, tus hoyuelos el los mofletes, y tus ojos marrones coca cola enormes.- Me reí.
Yo: No mientas, si yo de pequeña era un gremblin, blanca, con unos mofletes enormes, unos ojos saltones y gordita.
Tia: Estabas hermosa.- Me volví a reír.
Tia: Bueno cariño, te dejo que te acomodes.
Yo: Te importaría si me diera una ducha, e traído mi propio jabón.
Tia: Claro que te puedes duchar, pero no hacía falta que hubieras traído nada.- Se fue, empecé a organizar todo, tampoco me espere mucho, ya que en unos meses me volvería a ir. 
Los día allí se me hacían largos, apenas salía de casa, todo en general me recordaba a ella. Hablaba con las chicas una vez al día, al igual que con los chicos, y lo demás amigos que tenía por ahí. 
Pasados dos días, llego el día de el entierro, pero como todo entierro, principalmente, había que hacerla un velatorio  donde decidieron hacerlo en el chale de nuestro primo de Basauri. 
Ya estaba lista, era muy raro, no pensaba que tendía que hacer esto para mi madre, siendo tan joven, se me venía todo el mundo encima, ella era la única que de pequeña, en mis momentos de soledad, iba a echar en falta los abrazos que me daba, los consejos, los besos de buenas noches que me daba de pequeña.
Estaba en el cuarto preparándome, mientras mi tia y mi prima me esperaban en el salón.
Me asome al salón.
Prima: Estás muy guapa.
Yo: Gracias.


Tia: Venga chicas vamos....